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Argentores y autores: ¿Cómo ir del texto al escenario?

 

Como amantes del teatro musical, sabemos que nada equipara la emoción de entrar al teatro y disfrutar de una buena producción. Sin embargo, alguna vez te detuviste a pensar ¿Cómo es que lograron trasladar esa historia a las aclamadas tablas? ¿Cualquiera puede registrar una obra? E incluso ¿qué ocurre si yo quiero representar el escrito de un tercero?

 

En el posteo de hoy vamos a hablar de los derechos de autor repasando a modo de guía todos los pasos que se necesitan cumplir para ir del texto al escenario.

 

 

 

Derechos de autor de una obra.

 

Los derechos de autor son un factor esencial para tener en cuenta a la hora de montar un espectáculo. Al hablar de estos, nos referimos a la propiedad intelectual que posee un escritor por sobre sus palabras una vez que son registradas, generando valor y reconocimiento al arduo trabajo del sujeto para concebir dicho texto.

 

En nuestro caso, el territorio se rige bajo el derecho autoral francés que establece las bases de la Ley 20.115, donde se prevé la existencia de la Sociedad General de Autores de la Argentina, mejor conocida como Argentores; un organismo nacional encargado de la gestión y cobro de los derechos a favor de todos los autores de teatro, radio, cine, televisión y nuevas tecnologías. 

 

 

 

Dejando un poco de lado las definiciones técnicas y sabiendo que el derecho de autor representa la potestad que posee un escritor por sobre, en este caso, el texto dramático, nos conducimos a las siguientes preguntas: ¿Cómo puedo registrar o mismo obtener los derechos para la representación de un espectáculo teatral? 

 

Cómo registrar una obra de teatro.

 

Comenzando con la primera parte de la cuestión, vamos a tratar los procesos necesarios para resguardar y registrar tu trabajo de una forma efectiva al completar un documento que se encuentra totalmente disponible en la página oficial de Argentores https://argentores.org.ar.

 

Una vez en el sitio web, solo tenés que seleccionar el área bajo el nombre ¨Teatro¨ , hacer clic en la opción ¨formularios¨ y elegir la forma ¨1009: Declaración de obras originales para teatro¨. Una vez completa, no te olvides de adjuntar tu trabajo en un soporte perdurable en el tiempo para poder contar con el amparo de la norma, ¡y listo! Ya estas protegido bajo la Ley 20.115. 

 

 

 

Ya habiendo respondido el primer fragmento de la pregunta, los invito a contemplar la otra cara de la moneda y descubrir al segundo personaje de esta negociación.

 

Cómo solicitar derecho de representación de una obra teatral.

 

Como lo indican innumerables libros de literatura y artes, los textos dramáticos nacen con el objetivo de ser representados, por lo que no podemos hablar solo de un autor, sino que también de todos aquellos que desean darles vida a esas líneas. Muchas veces nos encontramos ante espectáculos teatrales que no son llevado adelante por su mismo autor, situación que nos conduce a responder otra de nuestras preguntas… ¿Cómo puedo presentar esta obra que yo no escribí? ¿Acaso son los mismo pasos que para registrarla?

 

Si y no. Si bien, a la hora de solicitar el derecho de representación al autor también tengo la obligación de acudir a la Sociedad General de Autores, es imprescindible prestar atención y llenar la forma correcta.

 

Si bien seguimos seleccionando el área teatral y la opción ¨Formularios¨, en caso de optar por montar una obra que no es de mi autoría, debo hacer clic y descargar la forma ¨1012: Solicitud de Autorización de obra¨. Siempre hay que tener en cuenta que el monto a pagar por los derechos de autor dependerá de la obra solicitada y que jamás es recomendable avanzar en el proyecto de no haber iniciado el trámite y obtenido el permiso del creador.

 

 

Solo resta preguntar… ¿Qué estas esperando? No comprender cómo funciona el derecho intelectual no debe ser una excusa para emprender tu propio proyecto teatral. De todas formas, acá te dejamos un pequeña ayuda para poder crear y emocionar a todos los que amamos este gran arte de conmover al público con nuevas propuestas. 

 

Por Cam Villalba.